Uno de los principales desafíos tras la finalización de conflictos internos es alcanzar la ansiada Paz y reconciliación nacional, pero también lo es determinar las responsabilidades por los abusos cometidos durante dichos periodos. En este contexto las amnistías constituyen instrumentos jurídicos-políticos admisibles (e idóneos) para la consecución de la estabilidad política y el cese de hostilidades. Finalidad que debe ser compatible, sin embargo, con las obligaciones de los Estados de investigar y sancionar a los responsables materiales e intelectuales de determinados crímenes y violaciones de derechos humanos que se hayan podido cometer durante dichos conflictos.
Se trata de una medida excepcional utilizada a lo largo de la historia en numerosas ocasiones y en numerosos países (Italia, Portugal, Chile, El Salvador…). En el caso de España, en concreto cuenta con numerosos precedentes. El más importante, pero no el único, ha sido la Ley de Amnistía de1977, gracias a la cual se sentaron las bases del actual sistema democrático. Atendiendo a esta circunstancia, es oportuno hacer una reflexión del necesario (y complejo) equilibrio que debe existir en los procesos postconflicto entre la garantía de intereses públicos legítimos (como la estabilidad política y la reconciliación nacional) y la necesidad de evitar la impunidad de los que han roto la convivencia.
Conferencia de Víctor Luis Gutiérrez Castillo, Profesor de Derecho Público Internacional, Universidad de Jaén, y Profesor de Derecho español, Université Paris Nanterre.
